8’00 h. Llueve. No salgo.
Desayuno lento, muy lento,
con doble café.
Le hacemos un poco de
higiene al apartamento. De limpiar lo justo.
Recojo pequeños restos a los
que llamo “arqueología povera”. Los
utilizaré para realizar recuerdos (souvenirs).
Clasificación de fragmentos de hierro oxidado, corteza árbol, chapa y semilla |
Radiografía de los elementos |
La acción de todo el día:
reflexionar.
Me voy por la tarde a la Biblioteca de la Universidad , a
trabajar en los cuadernos-libros.
Veo atardecer desde los
enormes ventanales y me recuerda el ventanal de mi aula en la Escuela de Arte de Sevilla.
A la cámara le he dado hoy
descanso.
Hasta mañana,
Carmen
¡Cómo que no hay comentarios! De eso nada, ni un día sin comentario para mis dos viajeras favoritas. Besos a chaparrón del de los cuentos de Conde de Halcón, que viaja con vosotras tan ricamente sin moverse del asiento, con la bisagra protegida por sus nolotiles...
ResponderEliminarÁnimo, chiquillas
Hola guapo, gracias, o mercis como dicen por aquí.
ResponderEliminarEl que está de viaje tiene otro tiempo, pero el que está en sus quehaceres diarios (me pasa mucho a mi), a veces no encuentra tiempo ni para leer el correo.
Miedo me da irme, estoy en las glorias, todo el día maquinando sobre mis cosas y eso me hace muy feliz, porque no son unas vacaciones, o si, pero muy distintas a las que suelo hacer cuando voy con Antonio, porque sabes muy bien que las parejas tienen que acoplar su ritmo horario y eso crea muchos conflictos de intereses, digo yo.
Un beso muy fuerte para los tres y un achuchon especial para ti
Mírala de cualquier cosita ella hace su arte. Cuánto me alegro de que estés viviendo ésta experiencia, creo te ha estado esperando desde hacía tiempo... Ala¡ sigue disfrutando...
ResponderEliminarEstar aquí es de las decisiones que más me alegran, estar a mi bola todo el día, porque Carmen va a la suya, no vemos claro, pero cada una a su ritmo.
EliminarYa me falta menos...
Un beso